Cuando estamos en un partido de pádel, el servicio puede ser nuestra mejor o nuestra peor baza. Lo amamos o lo odiamos, pocas veces hay término medio. Nos puede servir para iniciar el punto con contundencia o para perderlo sin ni siquiera haber empezado a jugarlo gracias a las faltas de saque.
No solo la doble falta es la única circunstancia en la que el saque es capaz de jugarnos una mala pasada. El reglamento recoge una serie de ejecuciones prohibidas que podrían ponernos en un aprieto y hacer que nuestros servicios nos cueste un punto en contra sin mérito ni demérito.
El arte del saque en pádel
Siempre suelo decir que, dentro de todos los golpes y movimientos que engloba el pádel, el saque es el más personal. Cada uno tiene el suyo propio, ya sea por la forma de colocar el cuerpo, de golpear la bola o por la coreografía que hacemos previamente a efectuarlo.
Los de algunos jugadores (esto sobre todo pasa en el nivel amateur), si nos paramos a fijarnos en ellos, resultan incluso algo cómicos. Un toque en los tenis para quitar la arena que sobra, cinco botes a la bola, ni cuatro, ni seis, miradita al rival y, por fin, el saque.
Sin embargo, hay otros que, sin saberlo y ni siquiera darse cuenta, durante esa preparación antes de su servicio, sobre todo en el momento justo previo de golpear la pelota, cometen una de esas ejecuciones que la normativa reconoce como “falta de saque”.
Consejos para evitar cometer faltas de saque
Para que no nos vuelva a pasar, o al menos no de manera consciente, a continuación vamos a conocer cuáles son las faltas más comunes que solemos cometer los jugadores de pádel y cómo podemos evitarlas.
Tocar o atravesar la línea de saque
Un error muy habitual ocurre cuando tocamos o atravesamos la línea que marca la caja de saque. Esta equivale al área rectangular desde la que realizamos el saque. La Regla 6 del Reglamento de Juego de la Federación Internacional de Pádel (FIP) indica que el servidor está “obligado a no tocar con los pies la línea de saque, ni la línea imaginaria continuación de la línea central“.
Por lo tanto, todo contacto que tengamos con esas líneas se considerará falta. Para huir de esto, a la hora de sacar deberemos asegurarnos de que nuestros pies están dentro de dicha caja en todo momento y no tocan ninguna línea.
Mantener los pies en la línea de fondo
Sabiendo esto, pasamos a la regla básica del saque. Todos sabemos, al menos en la teoría, que tenemos que respetar la línea de fondo al sacar. Esta se recoge también en la Regla 6, la primera de las dos que dedica el reglamento al servicio.
El jugador tendrá que “estar en el momento de inicio del servicio con ambos pies detrás de la línea de saque, entre la prolongación imaginaria de la línea central de saque y la pared lateral (recuadro de saque) y que los mismos permanezcan en ese espacio hasta que la pelota sea golpeada“.
Dicho de otro modo, nuestros dos pies deberán estar por completo detrás de la línea de fondo. Un error muy común se produce porque los jugadores quieren ganar terreno antes de lo que toca y realizan el saque algo más adelantado. También es frecuente que se invada de manera lateral el recuadro de saque que no corresponde.
El pie de apoyo en el suelo
Continuamos con otra de las faltas de saque más habituales. No todo el mundo sabe que debemos mantener uno de los pies en el suelo en todo momento hasta impactar con la bola. La FIP indica que “al sacar, el jugador no podrá andar, correr o saltar. Se estimará que el jugador no ha cambiado de posición, aunque realice pequeños movimientos con los pies que no afecte a la posición adoptada inicialmente“.
En el mismo sentido, pero de un modo más concreto, añade que “el jugador debe tener, al menos, un pie en contacto con el suelo“.
Según estas palabras de la normativa, es válido que tengamos un pie en el aire, siempre que el otro esté apoyado en el suelo. Con este gesto, ciertos jugadores intentan conseguir inercia hacia delante y ganar tiempo para llegar a la red.
Golpeo por encima de la cintura
Seguro que a muchos le han recriminado esto alguna vez. El reglamento es claro y establece que “en el momento de golpear la pelota en el saque, esta deberá estar a la altura o por debajo de la cintura“.
Es una de las faltas de saque más polémicas durante un partido y son muchos los jugadores que la cometen, ya sea por desconocimiento o por sacar con algo de ventaja. Sea por la razón que sea, este tipo de saque es antirreglamentario y puede ser reclamado.
La duda surge en los casos en los que la persona que efectúa el saque está con las rodillas flexionadas. Para este supuesto, la FIP matiza que la altura válida de golpe es “a la que en ese momento esté situada su cintura o por debajo de ella”.
La secuencia del saque
Puede que parezca algo bastante obvio, pero siempre es conveniente recordarlo todo. La teoría básica del saque es su secuencia: la bola tiene que golpear primero en el suelo y, después de esto, impactar con la pala.
Todas las infracciones que se comentan respecto a este orden se consideran faltas de saque, tanto si la pelota no bota en el suelo, como si lo hace más de una vez antes de efectuar el saque.
Fallar en el golpeo
Por último, nos referimos a esas ocasiones en las que erramos a la hora de golpear la bola. La FIP dispone que “en el momento de impactar la pelota o en un intento fallido con intención de golpearla, el saque se considerará efectuado“.
Esto significa que cualquier error al tocar la bola para sacar provoca una falta de saque. Aquí se incluyen los casos de que golpeemos la bola mal e, incluso, si no llegamos a impactar, pero sí hacemos el intento.
En definitiva, esperemos que todos estos consejos te ayuden y no cometas faltas de saque en tu próximo partido.
